¿PORQUÉ SER DIPLOMÁTICOS?

Cuando hablamos de "Diplomacia" no solamente hablamos de esa labor que hacen los representantes y políticos de nuestros países.

La Diplomacia va más allá. Es una actitud que debemos tomar ante las distintas circunstancias que se nos presentan en nuestra vida.

La diplomacia es el Arte de arreglar las diferencias de forma educada, logrando que cada parte obtenga lo que desea.

En la sociedad actual, se debe de actuar con diplomacia para obtener lo que se quiere, ya que habrá personas que dadas su educación, condiciones sociales, crianza y actitud, harán verdaderamente difícil el que se logren las metas planteadas.

Sin embargo, y aunque en muchas ocasiones se desee tirar todo por la borda o perder la compostura para decirles lo que se merecen, es mucho mejor mostrar una actitud más inteligente y conservadora. Logrando enfatizar los beneficios que se obtendrían para ambas partes el que se lograra tal o cual objetivo y sobre todo, demostrando de forma educada y pacífica que las cosas pueden generarse sin el uso de la violencia verbal, psicológica o física. Sin necesidad de amenazas o amedrentamientos.

Tan solo en nuestro propio círculo social, habrá personas que pertenezcan por alguna razón ajena a nuestra voluntad a dicho grupo, y que aunque no sean del completo agrado, se tiene que convivir con ellos para conservar la armonía del mismo, o bien, para no perder algunas amistades que se consideran valiosas.

En nuestra cualidad para lograr el buen entendimiento entre los miembros del grupo, y el arte de usar nuestra diplomacia para obtener lo que se desea, radicará el éxito en el objetivo de mantener unido al círculo de amigos, aún y cuando se necesite de toda nuestra paciencia para lograrlo, ya que de otra forma, a pesar de que se merezcan que se les trate de otro modo, no vale la pena perder el estilo por personas que ni siquiera significan nada en nuestra vida, y a las cuales hay que tolerar para no perder a las que de verdad nos importan.

Ésto se traslada fácilmente a nuestro ambiente laboral, en el cual, el 99.99% de las veces habrá por lo menos una persona que obstaculice de alguna manera nuestro trabajo, ya sea porque no comprende la magnitud de lo que cada persona hace en su puesto o bien, simplemente porque se siente infeliz o inconforme consigo mismo y con su empleo.

Las razones para complicarle la existencia al otro pueden ser muy diversas y en la mayoría de los casos incomprensibles para una persona normal. Sin embargo, esta gente problemática, ve la realidad desde su propio punto de vista, desde su muy particular enfoque, desde donde se sienten amenazados, dolidos, agredidos o simplemente piensan que todos hacemos mal nuestro trabajo y que él podría hacerlo todo mejor con una mano atada a su espalda y teniendo los ojos vendados a la vez.

En fin, el éxito radicará en nuestra capacidad para lograr de forma muy diplomática, que el otro vea lo que nosotros hacemos, que entienda que cada uno está en ese lugar porque tiene la capacidad para estarlo y que de alguna forma, todos forman parte fundamental en el engranaje de esa gran máquina que es la empresa para que se labora, en el cual, ya sea siendo un simple tornillo o el motor que mueve a la maquinaria, todos somos importantes, sobre todo si se considera que el motor no se podría sostener en su sitio, si no contará con varios tornillos que lo mantuvieran firme a la base.

Ustedes que opinan???

Les dejo esto a su criterio y espero que lo tengan en cuenta para que piensen dos veces antes de perder los estribos ante alguna persona o circunstancia que los pueda hacer enojar o bien, pretendan frustrar sus planes de éxito.

Recuerden que no se debe perder el estilo y la compostura ante nadie, porque después, todo eso, se usa en nuestra contra en cualquier momento. No es bueno mostrar debilidad ni darle al enemigo las herramientas que necesita para destruirnos. Mantengan bien en su mente esto que voy a decirles, en lo personal, en lo laboral y en lo social todo es como un juego de mesa, y la mejor estratégia, será la que ganará, el azar es solo un factor que no siempre está de nuestro lado y no se debe apostar todo a la suerte.